Por: Kenya Téllez (Yax)
Fotos por: Hector Scandini 
Viernes 27 de septiembre de 2019.

El domingo 22 de septiembre del
presente año, el Teatro Metropólitan se vistió sus mejores “garras” musicales
con una propuesta atrevida y renovadora: una visión del rock urbano (tan
inscrito en la memoria de la Ciudad de México) con la compañía de la Orquesta
Sinfónica Internacional. En Rock & Historias, por supuesto fuimos testigos
de esta inusual conciliación de géneros que combinaron maravillosamente lo
mejor de la identidad del México conurbado y contestatario de los años 80, con
las complejas técnicas de la música clásica.

En la extensa fila de los
asistentes predominaban los colores de la mezclilla, el cuero negro, los
paliacates rojos, que posteriormente llenaron las butacas. Inevitablemente
remitían a la moda que predominaba los años 
en los cuales asistir a las “tocadas” de Rock era un delito que, no
obstante, encontraba desahogo en la clandestinidad y el anonimato. Se hizo
presente la ironía de éste hecho histórico pues los fans de éstos expositores
tuvieron la oportunidad de escucharlo en uno de los más elegantes escenarios de
la Ciudad de México.  Ellos mismos
pusieron de manifiesto su emoción impaciente al dejar sonar una rechifla a las
seis de la tarde con seis minutos  y
después de cada una de las llamadas antes del espectáculo.

Al fin se dejaron escuchar las
primeras notas interpretadas por la Orquesta Sinfónica Internacional con la
deslumbrante voz, presencia e interpretación de la flautista y vocal venezolana
Margarett Álvarez quien interpretó el tema “rock and roll”. Tras esa apertura se presentaron cada una de las bandas.
Algunas  manifestaron que el evento fue
de singular importancia para ellas pues Hevy Nopal celebraba su 30º aniversario  al ritmo de un “asalto chido” para continuar
tocando las fibras más sensibles del público con “No tengo tiempo” del maestro
“Rockdrigo” Gonzáles  y los hermanos
Alanis de la banda Nextmetalmexicano 
compartieron con nosotros un emotivo homenaje luctuoso a sus padres con
el tema “agonizando”. El publico aplaudió al ritmo de canciones como: “Loco/Tu
forma de ser”, “Toque mágico”, “Quién te cantará”, “Tlatelolco”, “Perdedor”,
entre otras,  para culminar con una
versión conjunta de “We are de champions”, varias de ellas acompañadas
intachablemente por la Orquesta.

De esta manera, los asistentes
siguieron con gritos entusiastas canciones en las que, para algunos se refugió
alguna vez su rebelde juventud,  para
otros se develaron más tardíamente bajo influencia de sus padres, hermanos o
amigos. Esta presentación demostró que la música es un arte que no conoce
fronteras de clases sociales, generaciones o gustos particulares ya que siempre
encuentra una forma de acoplarse a todas las preferencias. Así nos deleitamos
con lo que, en palabras de Arturo Huizar de la banda Luzbel fue “La fusión del
rock mexicano con la música clásica del mundo”, un proyecto que abre las
puertas par llevar un poco de México a cualquier parte y traer a México de todo
un poco.

Por ERICK DUARTE

Melómano, Apasionado de los Conciertos y la Cerveza // Aun me gusta meterme al slam y volar entre la gente // Estudie Management y Periodismo Musical // Licenciado en Informática (IPN)

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